10 de diciembre de 2009

Suma y sigue (Vol.15)


Estaba estudiando. Corrijo. Estaba intentando estudiar: la mente en blanco al principio y los apuntes en el punto de mira. Procuraba no pensar en ti, pero ¿cómo iba a hacerlo teniéndote justo a mi lado? Poco a poco encontré la manera. Supongo que me fui acostumbrando. Sabía que al toque de las 8 podríamos estar juntos, sin papeles de por medio. Sólo tú y yo. Mano a mano. Dispuestos a comernos el mundo. Era por ello que no conseguía leer dos líneas seguidas, lo que tenía que llegar era demasiado prometedor, quería hacer todos los planes posibles e imaginarmelo mil y una veces.

Por suerte (o desgracia, todo depende según se mire), llegó el milagro: conseguí adentrarme en la materia. Creo que pensé que cuanto antes acabase, antes podríamos irnos. Era como si te hubieras ido. Y antes de que me diese cuenta, antes de poder echarte de menos, una caricia buscó la palma de mi mano. Tus dedos se entrecruzaron suavemente con los míos. Tu pulgar dibujaba círculos en mi piel. No articulamos palabra alguna. No eran necesarias. En esa foto sólo había lugar para tres: tú, yo y nuestra complicidad.


SONG OF THE DAY: "We Are Okay" Joshua Radin


Slaty

1 comentario:

Anónimo dijo...

¿¿Y para qué hablar si a veces no hace falta??
Genial texto, de los mejores que te he leído :)

Gracias por todo, ets la millor!

T'e!

Happy 15!